Una Vía Obsoleta que Frena el Desarrollo
Constanza. — Cada viaje por la carretera Constanza – El Abanico se ha convertido en un acto de fe. Conducir por esta vía, especialmente en el tramo de Casabito, es una experiencia que combina la belleza escénica de nuestras montañas con una dosis de riesgo inaceptable en pleno 2025. Es con profunda preocupación ciudadana que alzamos la voz para señalar el estado crítico de esta arteria vial, cuyo abandono por parte de las autoridades no solo frena nuestro progreso, sino que pone en peligro constante a los que transitan en ella.
Resulta irónico y profundamente revelador que esta carretera fuera construida en la década de 1950. En esa época, Constanza era una comunidad emergente con una población que quizás no alcanzaba los 2,000 habitantes. Hoy, en 2025, somos una pujante ciudad que se estima supera los 100,000 habitantes, junto a su municipio hermano de Tireo y el Distrito Municipal de La Sabina.
El contraste es aún más abrumador en el sector productivo. Mientras que en los años 50 no se sembraban ni 1,000 tareas de tierra, hoy nuestra tierra fértil alberga más de 90,000 tareas de cultivos que alimentan al país. Somos el motor agroalimentario de la región, y sin embargo, nuestra principal vía de comunicación es un relicario histórico, estrecho y deteriorado.
Los Números del Peligro: Un Riesgo Diario y Calculable
La ecuación es simple y alarmante:
· Flujo Vehicular: Un tránsito diario estimado entre 1,000 y 1,500 vehículos.
· Tipo de Tráfico: Una gran parte de este flujo corresponde a pesados un vehículos de carga, cuyas dimensiones y peso no fueron concebidos para una vía de estas características.
· Resultado: Un riesgo latente de accidentes, cuellos de botella, y un desgaste acelerado de una infraestructura que ya cumplió su vida útil.
Cada viaje a la capital, cada transporte de mercancía, cada visita de un turista, se realiza bajo la sombra de la incertidumbre. La carretera Constanza – El Abanico se ha convertido en un pasivo para la seguridad vial y la economía de toda una provincia.
Ante esta realidad, la queja silenciosa no es suficiente. Es hora de pasar a la acción organizada y contundente. Este artículo es un llamado directo a los comunicadores, periodistas, blogueros, creadores de contenido y líderes de opinión de Constanza y de toda la República Dominicana.
Necesitamos unir nuestras voces para orquestar una campaña de incidencia ciudadana masiva y profesional. El objetivo es claro:
- Exigir a las autoridades que declaren como prioridad nacional la reconstrucción y modernización de la carretera Constanza-El Abanico.
- Convocar un diálogo urgente que reúna a las autoridades locales, gremios empresariales, asociaciones de transporte y la sociedad civil para presentar un frente común.
- Trabajar en una propuesta técnica, un plan maestro que sea entregado a las instancias superiores del gobierno, demostrando que no solo señalamos el problema, sino que ofrecemos la solución.
La carretera Constanza – El Abanico es más que asfalto; es la columna vertebral de nuestro desarrollo. Su estado actual es un reflejo del olvido al que hemos sido sometidos. Pero tenemos el poder de cambiar esta narrativa. Unámonos como comunidad, utilicemos nuestras plataformas y nuestra influencia para convertir esta causa en una prioridad ineludible.
Invitamos a todos los medios de comunicación y comunicadores a replicar este mensaje, a investigar, a generar contenido y a mantener viva la llama de esta reivindicación. Es momento de empoderarnos y de recordarle a las autoridades que el progreso de Constanza no puede seguir estancado en una carretera de los años 50.
