Santo Domingo, RD. – El Centro de la Colonia China en República Dominicana hizo este lunes un llamado firme a todos los miembros de la comunidad china en el país para que continúen cumpliendo de manera estricta con las leyes dominicanas y manteniendo un ambiente sano en sus negocios, que permita el desarrollo de sus actividades en un clima de armonía y paz.
La institución ofreció estas declaraciones durante una rueda de prensa realizada el lunes 7 de julio en el Restaurante Escocia, ubicado en la avenida Duarte. El encuentro fue encabezado por Yeuk Fai Cheung, presidente del Centro de la Colonia China, y doña Rosa NG, presidenta de la Fundación Flor para Todos. También estuvieron presentes Marino Joa, presidente de las Familias Joa; Miguel Joa Gingas, vicepresidente; Tina Chan Aquino y otros propietarios de los negocios intervenidos; así como Gaipan Sang, directivo de la Colonia China.
En sus intervenciones, los representantes hicieron un llamado a las autoridades y a la sociedad en general a fomentar un clima de respeto, legalidad y convivencia pacífica. “El cierre masivo de negocios chinos en la avenida Duarte no solo afecta a nuestra comunidad, sino que envía un mensaje negativo a quienes, como nosotros, hemos apostado por invertir y contribuir al desarrollo económico de la República Dominicana. Solicitamos a las autoridades actuar con equidad y prudencia”, manifestó Yeuk Fai Cheung.
Por su parte, doña Rosa NG subrayó que “es urgente detener cualquier práctica que alimente la discriminación o el prejuicio contra los comerciantes chinos. Pedimos diálogo y orientación, no acciones que pongan en riesgo empleos ni la integración social que hemos construido durante generaciones”.
El Centro de la Colonia China también solicitó a las autoridades del gobierno dominicano su colaboración para orientar y ejercer el cumplimiento de las leyes con prudencia y sin parcialidades que puedan perjudicar las inversiones chinas. “El sistema abierto del comercio en el que participan los negocios chinos genera beneficios directos para el pueblo y para la nación dominicana”, destaca el documento.
La presencia china en República Dominicana se remonta a 1864 y, durante más de 160 años, los pequeños grupos de nacionales chinos y sus descendientes han sido reconocidos como personas laboriosas, colaboradoras y de apego a la ley, y han realizado aportes significativos al desarrollo económico, social y cultural del país. En las últimas décadas, el crecimiento económico dominicano ha atraído nuevas inversiones chinas que, con cuantiosos recursos, han contribuido a la generación de empleos y al suministro de productos esenciales para la población de menores recursos.
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