Al llegar al final de este año 2025 y asomarnos con esperanza al inicio del 2026, hago mías —parafraseando al Premio Nobel de Literatura José Saramago— estas palabras: “Soy responsable de lo que escribo, no de lo que tú interpretas.”
Desde esa responsabilidad, comparto este mensaje cargado de gratitud, reflexión y compromiso.
El 2025 nos deja grandes enseñanzas. Fue un año de esfuerzos colectivos, de avances significativos, de metas alcanzadas gracias al trabajo, la vocación y la entrega de muchos hombres y mujeres que creen firmemente en el valor de la educación.
Celebramos las conquistas logradas, las oportunidades creadas y las voluntades que no se rindieron aun en medio de las dificultades.
Pero también fue un año de pérdidas y bajas sensibles, humanas e institucionales, que nos recordaron la fragilidad de la vida y la importancia de la solidaridad, la empatía y el acompañamiento mutuo. A quienes ya no están, nuestro respeto; a quienes continúan, nuestra fortaleza renovada.
A los maestros y maestras de la República Dominicana, y muy especialmente a los del Distrito Educativo 06-02, mi reconocimiento sincero. Su labor diaria, muchas veces silenciosa, sigue siendo el pilar fundamental para la construcción de una sociedad más justa, crítica y humana.
A los miembros del Comité Municipal de la ADP, Seccional Constanza, les exhorto respetuosamente a asumir un rol más frontal ante las situaciones que presenta nuestro Sistema Educativo. Por ahora me limito a puntualizar que el tiempo que le resta a este año no permitiría detallar cada una de ellas; no obstante, confío en que cada quien sabe claramente a qué me refiero. El compromiso gremial exige presencia, acción y coherencia.
A las familias, les hago un llamado firme y esperanzador: apoyen a sus hijos e hijas en todo el sentido de la palabra. Recordemos siempre que “si educamos a los niños, no tendremos que castigar a los adolescentes, jóvenes ni adultos.” La educación comienza en el hogar y se fortalece en la escuela.
Aspiro a un 2026 lleno de amor, paz, éxitos y esperanza, en el sentido más amplio y profundo de estas palabras. Que sea un año de reconciliación, de crecimiento colectivo y de renovado compromiso con la educación y la sociedad que soñamos.
Con estima y responsabilidad,
Prof: Dionisio Páez Batista
dionisio.paez@docente.edu.do
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